Conflictos objetos de mediación familiar
¿Cuándo se debe recurrir a la mediación familiar?
El proceso de mediación familiar, puede tener lugar previamente a un proceso judicial, una vez iniciado el mismo paralizándolo, o posteriormente a la sentencia judicial si se buscase una modificación de la misma acordada por las partes. En el caso de rupturas de parejas, la atención y educación de los hijos, el reparto de cargas económicas o la vivienda, o en el caso de personas con cualquier grado de parentesco, la mediación familiar permite prevenir, simplificar o finalizar con un procedimiento judicial.
¿En qué situaciones no es adecuada?
La mediación familiar no será aplicable en aquellas situaciones en las que una de las partes no quiera llegar a ningún tipo de acuerdo. Además, en casos de violencia hacia una de las partes o enfermedad grave también se trata de evitar este tipo de solución de conflictos.